Antes de dejarme ir
me llamaste.
me dijiste que ya no ibas a tolerar más, aunque te doliera en el alma
mi desgano
mi desintrés
mi enfermedad.
Me sacudiste hasta hacerme llorar
darme cuenta que no podía hacer nada por vos
que iba a seguir
así
hasta que algo me cambiara la vida
Antes de que volara
me pediste que lo intentra una vez más.
que olvide el reproche
-pero quedó grabado en mi frente-
Una y otra vez
pienso en nosotras dos
y veo el contraste. el yin y el yan encerrado en la perfeccion de los colores solos y limpios
que no necesitan complementarse porque ya no son por si solos,
pero en el fondo no dejan de necesitarse
Emprendí mi viaje de vuelta
imaginé tus ojos
el día antes de mi partida.
No se que pueda ofrecerte que no pueda hacerlo otro
Lo que si se, es que no quiero que nadie más lo haga por mi.
Sueño una y otra vez, con que ya no necesitas llamarme y gritarme que
me queres viva
porque la vida que me diste
todo este tiempo se acaba
y se que te elijo y te volvería a elegir
aunque lo nuestro haya sido tan solo
una casualidad
miro hacia atras y vuelvo a creer
que las personas se encuntran en esta vida
por diferentes razones
y la nuestra fue tan solo hacernos bien.
Porque al acompañarnos, disfruto y siento
que se me hincha el pecho cuando pienso cuanto te quiero.
Porque entre lineas podes leer las disculpas que te mereces hace tanto tiempo
y que te tendré que seguir pidiendo porque me conoces, dura y terca
Porque tan solo no podía dormir... y viniste a mi mente.
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