No quería llegar hasta este punto, pero a veces es inevitable. Me hinche soberanamente las pelotas, esas que yo tengo y vos no. Detesto la histeria, porque pienso con la concha y no con la cabeza. Y cuando pienso con el corazón, te asusta. Basta, se fini. The end. Game over. No te acerques porque te pincho. El que espera, desespera. Y no tengo tiempo para eso. No quería pensar que eras un boludo, pero no me das opción.
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