El camino retorna.
Soy lo que me
sucede.
Perdí el tren por
no mirar el reloj antes.
Miento,
Lo perdí por saludar
a una querida compañera de otrora, abrazarla y contarle que duro había sido el camino esta
vez.
Algo me retrasa y me interpela de nuevo, hasta que pueda contestar(me).