Te pedí que me leyeras esa parte una vez más.
Quería estar segura de que las dos entendiéramos lo mismo.
Hacía tanto que no te escuchaba a través del teléfono, y sin embargo sentía como que lo había estado esperando todo este tiempo.
Esa noche, cuando aterrizaste, nos fuimos a caminar por Palermo. Yo pensaba que no esperábamos nada, pero estaba equivocada. Lo dimos todo. Quien te dice que nos crucemos de nuevo por ahí.