lunes, 30 de enero de 2012

Enero Andate por Favor! Andate!

selva

No puedo ver más que un rato afuera porque me congelo. Me congelo aunque hagan 40︒C. Es el fantasma de lo que veo por la maldita ventana audiovisual. Es la fobia que me genera. El miedo que me transmite. La paranoia de que todo lo malo me puede pasar. Entonces prefiero sumergirme en las letras de alguno que se arriesgo a escribir un libro, y vivir en ese mundo paralelo.

lunes, 23 de enero de 2012

pintando de color

paisaje catamarqueño. donde vas no te preocupes, siempre vuelves. donde tira el mar. hacia ahi vamos. espero no perderme por ahi, tan lejos.

domingo, 22 de enero de 2012

sos alguno de todos ellos

Desde que te dije en palabras la imagen que tenía de vos en mi, desconfiaste. No voy a especular en absoluto con tu histeria. Mis apenas años de vida adulta no me hacen ser una pendeja. Dejame deslizarme en tu mundo. La paranoia enloquece y el instante es tan fugaz para arruinarlo. Dame todo pero poco. No me sometas a tus decisiones. Acompañame. Una cita en en el cruce de avenida 9 de Julio y Corrientes, y no te voy a cronometrar, te espero.

domingo, 15 de enero de 2012

Salimos corriendo de la tienda de café. Odio las tiendas de café, porque no tomo. Pero vos seguías siendo un fanático. Salimos corriendo porque no pagamos. No teníamos ni un peso. La ciudad la conocía un poco más yo, porque vos vivías bastante drogado, nos metimos en unas callecitas como si fuese del bajo de la ciudad. Contra una paredón nos empezamos a besar, pero no tenía ganas de que me levantes la pollera en medio de un callejón. Te pedí que caminemos, y como no parábamos de reírnos por como nos habíamos escapado de la tienda, no te sentiste despreciado. Siempre fui como una nena pequeña para vos. Y nos chocamos con unos cientos de autos estacionados frente a una pantalla en la que pasaban una de tus películas favoritas, Pi. Nos sentamos en el pasto y dejé mi cabeza sobre tu falda, y mirábamos la escena del autocine más que la película, y nosotros con los pies descalzos en el pasto llenos de amor, en una ciudad ajena que nos recompensaba con calor y cine.

miércoles, 11 de enero de 2012

Apoyó el vaso sobre la mesa después de un trago largo y apresurado.
-Estuve todo el día esperando este momento Cata- dice Clara con las piernas sobre la mesa, un cigarrillo por encender en la mano izquierda y el código penal en el bolso que usa como cartera. Volviendo a ser ellas, las mismas, otra vez.
-Vivir en Buenos Aires en enero es así Clarita, ya te habías olvidado lo que era- dice Cata revoleando los ojos desde la pantalla de su portátil hacia donde se ubica Clara, al frente pero en la misma mesa redonda.
Y si suena el teléfono y todo se queda quieto. -Tengo arroz con atún, querés?
-No. otra vuelta de tuerca y Cata con su culpa judía. no hay nada como la fruta en estos días.
-Luchar en Bs As era asi Catita, un mambito caminando pero en tacones. Como quieras que sea, pero que sea ya. Y si nos tomamos un tiempito?
-Como te ves a los cuarenta a pan y cebolla? -Yo bárbaro. Pero con un paquete de marlboro en la mesa.
-Que los puchos y los forros nunca falten, tiro Celina.
-Como en la cárcel- agregó Cata.
Ni que te lo cuente después de tres meses... cada cual a su manera.
-Puta!- dijo Celina
Y Clara atajado acotó: No, yo no!
Y Cata se rió como asumiendo la culpa.

domingo, 8 de enero de 2012

Sos un pelotudo, me dije al espejo y revolié unos libros que me había traido del ultimo viaje. Se cayó la tarjetita que me regalaste de la heladería y más ganas tenía de romper todo. Volver a verme al espejo todo lastimado, con los nervios de punta saliendo por los ojos. La sensación de miedo e incertidumbre. La crisis del casi un cuarto de siglo de vida.

pintando al oeste

un espejo que refleja lo bueno y lo malo con colores distintos. una estacion, una duda y una espera sin fin. cuando te pedi que te tranquilices, solo pensaba en el viaje. a veces los impulsos pueden más que las soluciones.

sábado, 7 de enero de 2012

ROCKET WOMAN

Y pienso que va a ser un tiempo más bien extraño. Un tiempo, que puede ser un año, que puede ser un cuatrimestre, que puede ser lo que me quede de vivir esta vida. Un horóscopo me dice que es un año de viaje, de pasión, de trabajar la ansiedad. No soy la mujer que piensan que soy en casa. Soy un barrilete rosa, que intenta volar alto pero es naif. Me gusta que me cuenten cuentos y creo en los reyes magos. Aunque no han dejado nada en mis zapatos este año. Mientras el calor inunda desde la ventana, me relajo a seguir viviendo siempre que siga sonando alguna melodía que me haga mas amena la estadía en tierra.

jueves, 5 de enero de 2012

ultimo tren...

Tengo tantas ganas de vos. quiero que esto termine pronto, poder volver a sentirte contra mi, oler tu pelo.... no se si esta bien o mal lo que pasa. solo se que nunca hubiera imaginado que me pase, lo que me pasa con vos. te extrano tanto! pienso tus rutinas durante el dia, cuando me despierto... en el trabajo... cuando me voy a dormir. a veces me animo a preguntarte, pero otras veces me aguanto las ganas porque estos momentos son solo tuyos. cada dia que pasa te extrano un poco mas y tengo miedo de llegar a olvidarme de tus manias, de tus gestos que a veces me enoja tanto no poder descifrar. pero a la vez, tengo miedo de ahogarte, de prestarte mas atencion de la que querrias que te preste, y aun mas, de que a vos no te pase nada de lo que me esta pasando a mi... que vos estes en tu tren de las nubes, y que pase muy lejos del mio.
tanto mambo en verano, no es buena compania.
Volver a hurgar en la música de la infancia.
Encontrar ahí la mitad de lo que soy hoy.
"Hoy es día de alegría mi corazón" cantaba Xuxa en el año 1992 y yo recuerdo tener un pizarrón en mi cuarto lleno de frases suyas que no podía escribir aún, que escribía mi madre mientras yo dibujaba corazones de colores. Hasta que mi padre, fastidioso de escuchar Tindolele o Chufa cha, me regala un Compact Disc de una chica que usaba sombreros y vestía normal, llamada Daniela, se diferenciaba bastante de Reina Reech y su muñeca, o de Cris Morena y sus chiquititas. Daniela cantaba letras propias y letras de grandes músicos como Spinetta o Santaolalla. Es mi padre el que intenta hacerme incursionar en la música después de haber tenido toda la ternura de mi madre "jardinera" y paciente que a pesar de su profesión explico todo a tiempo y las verdades sin metáforas.
Y entonces en 1996, un par de años después de su lanzamiento, mi padre me sienta a escuchar The Dark Side of the Moon de Floyd. Se abre un mundo ante mis oídos, que se convierte en cientos de discos que ya podía escuchar, que él guardaba para las noches de whisky. Entonces los sábados desde la mañana en mi casa se escuchaba desde Silvio Rodriguez temprano, porque era un clásico de mamá, pasando a la tarde por un Elton John "but it´s not sacrifice just a simple word", hasta llegar a la noche y escuchar un Pavarotti o un Gal Costa. Así eran los fines de semana en casa, música.
Hoy, hay muchos más silencios pero suena en la memoria la guitarra de mi hermano, que supo aprender los acordes de todos esos músicos que se escuchaban en casa.