domingo, 16 de octubre de 2011

hatomos

Salió al pasillo buscando aire. se sentó en la escalera que da al primer piso, ala izquierda, corredor E. puso su cabeza entre las manos y lloró. la incomparable sensacion de no tener nada. la respiracion entrecortada y las miradas del resto sobre su cabeza. no le importo, ya no la queria caretear mas. luego, un verrinche. alguien descompensado, desbaratado, harto, sin dormir, pero sin lugar para el llanto. angustia. nadie dijo que aca no se podia gritar. me contaron una historia que ya conocia. me dijeron que cuando me levante me iba a acordar del sueño. cuanto pueda soportar, es un misterio. digamos que nadie sabia nada. hagamos las preguntas que nos tenemos que hacer. y si no me respondes, voy a encapricharme. nada me puede alcanzar. quizas hoy me tome un recreo. de esos que duran cinco gloriosos minutos y ni siquiera llegas a tocar la ventanilla del kiosco. sentido. colorido. me gustaria no tener personalidades multiples. mejor llorar en la escalera, ya no tiene sentido gritarte más.

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