Bastaba con ver el día nebuloso para descubrir que ninguno estaba muerto, o todos vivos en el otro mundo.
Negando la comunicación y tomando los atajos, se van tamizando aquellos que temen, que huyen y que confirman la era. El agua, no te moja ni toca, cuando estas nublado. Los proximos pasados se acercan, ni él ni vos se agarraron a la liana. Vuelven a buscar el punto en el que ambos llegan y ya descubrieron cuanto más sabios se sienten al ser gustados. EL sonido del papel crujiente del chocolate blanco que se camufla en sus manos. Ella lo oye llegar. Revolea los ojos como dos caramelos de menta. No están solos ni acompañados. Van de viaje de ida... shhhh... sigan. Él lo parte en dos diferentes, le ofrece. Comparten. El olor del chocolate les llena de energía el alma y ya es sufciente para que sus niveles de endorfina se equilibren. y el mar, ya no es espejo en estos años, pero la vida sigue siendo tan y aun más corta. sin perder y sin chistar
1 comentario:
.sin perder y sin chistar.
que dificil-- por una vez tengo ganas
Publicar un comentario